El buque oceanográfico Angelescu zarpó para investigar el área del Agujero Azul

Chou Pesqueira

En el marco de la Iniciativa Pampa Azul, la embarcación del INIDEP realizará esta campaña como parte del Proyecto Agujero Azul, que busca conocer esta zona de alta productividad primaria localizada a 500 km del Golfo San Jorge.

BIP Víctor Angelesco. Foto: Gentileza INIDEP.

El BIP Víctor Angelescu, perteneciente al Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), zarpó el pasado sábado 20 para poner en marcha la campaña “Oceanografía biológica del Agujero Azul”, que se lleva adelante en el marco del Proyecto Agujero Azul perteneciente a la Iniciativa Pampa Azul. La misión es la primera que se lleva adelante para la Iniciativa tras la salida de la pandemia, y busca obtener información acerca de una de las Áreas Geográficas Prioritarias con mayor abundancia de recursos biológicos de nuestro mar.

El área de trabajo estará comprendida por la región de la plataforma exterior y talud entre los 44º y 46º 30’S. El crucero científico está liderado por el investigador Principal del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Marcelo Acha, y tiene como objetivo general conocer el funcionamiento del frente del talud continental.

Al respecto, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, comentó: “Es necesario contar con políticas de Estado para un conjunto de áreas estratégicas: en ese sentido, una Argentina investigando y mirando al sur, a las Malvinas y a la Antártida, es esencial. Nadie puede creer ni defender lo que no conoce, es por eso que hemos puesto de vuelta en marcha esta iniciativa de investigación científica de la que participan siete ministerios, y que es parte de las estrategias que nos permitirán seguir reafirmando la soberanía y conocer en profundidad las riquezas de nuestro Mar Argentino”.

Por su parte, la coordinadora Ejecutiva de la Iniciativa Pampa Azul, Carolina Vera, afirmó: “La realización de esta campaña es fruto del gran esfuerzo articulado de investigadores, ministerios e instituciones que conforman Pampa Azul, que incrementará el conocimiento sobre los mecanismos de productividad biológica y permitirá comprender cómo las especies utilizan este ecosistema así como entender la captación de carbono que allí se produce.

Pablo Nuñez, subsecretario de Coordinación Institucional del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación (MINCyT) y coordinador del Consejo de Administración del Fondo PROMAR, señaló: “La partida del buque Angelescu en el marco del Proyecto Agujero Azul, financiado por nuestro Ministerio con un monto de U$S 243.494, representa un hito muy importante en los objetivos que nos trazamos para invertir en profundizar el conocimiento de nuestro Mar Argentino, buscando obtener información acerca de una de las áreas geográficas prioritarias”. Y concluyó: “Estas políticas se enmarcan en la Iniciativa Pampa Azul, que hemos relanzado y jerarquizado entendiendo al conocimiento del mar como un eje central para la sostenibilidad ambiental, el cuidado de nuestros recursos y un mejor ejercicio de nuestra soberanía nacional en territorio marítimo”.

Algunos de los objetivos particulares de la campaña son: identificar los componentes de las comunidades biológicas (diversidad); realizar un relevamiento de las especies de interés comercial con énfasis en la región de plataforma continental sita al este de la Zona Económica Exclusiva (aguas internacionales) y efectuar un análisis de la distribución vertical del zooplancton.

La investigación tendrá una duración de 20 días y contará con 14 integrantes del equipo científico-técnico, que llevarán a cabo actividades como la toma de datos de temperatura, salinidad y fluorescencia del agua; toma de datos de corriente y toma de muestras de plancton. Participan representantes del INIDEP y del Instituto Argentino de Oceanografía (IADO-CONICET).

Para cumplir con los objetivos, se utilizarán redes de arrastre de fondo, redes de media agua, CTD con fluorómetro y oxímetro, roseta oceanográfica, rastra tipo Piccard y una Multired para realizar el muestreo de zooplancton.

Características del Agujero Azul
Con una superficie aproximada de 6.600 km2, el Agujero Azul constituye un área particular del Talud Continental. La misma está localizada a unos 500 km al este del golfo San Jorge, entre los paralelos 45°S y 47°S y los meridianos 60°O y 61°O. La zona presenta la característica de ser la única en que la isobata de los 200 m se extiende por fuera de la Zona Económica Exclusiva.

El Agujero Azul es una región de alta productividad primaria cuya dinámica es temporal y espacialmente predecible. La zona es área de alimentación de varias especies de gran importancia económica tales como la merluza, varias especies de peces australes, mictófidos y calamares, y de muchas especies de aves y mamíferos. Debido a la abundancia de recursos biológicos, el sector lindero a la Zona Económica Exclusiva registra una intensa actividad pesquera extranjera que se centra en la captura del calamar. El impacto de la pesca sobre la biodiversidad y las cadenas tróficas es en gran medida desconocido, por lo que urge obtener información fidedigna para promover el manejo sustentable de la pesca en esa región.

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Abre “Océano. Volverse Azul”, la exhibición del C3 que busca fomentar la cultura oceánica

Con un evento previo en donde funcionarias y funcionarios recorrieron la exhibición, se inaugura la muestra inmersiva e interactiva que pone de relieve la influencia mutua entre el océano y las personas, y busca reflexionar sobre las acciones necesarias para la preservación del planeta. 

La muestra podrá visitarse todos los viernes, sábados y domingos, de 14 a 18 horas.

A partir de este viernes 29 de octubre se podrá visitar en el Centro Cultural de la Ciencia (C3) la exhibición “Océano. Volverse Azul”, una muestra inmersiva e interactiva para todo público que recorre la cultura oceánica, su relación con nuestra forma de vida y su impacto ambiental. Es un espacio de 450 m², que propone una transformación cultural y una mirada nueva respecto a este recurso crítico para la humanidad y para nuestro país, dado que más de dos tercios de la superficie de la Argentina están cubiertos por las aguas del Mar Argentino y el océano Atlántico Sur. La muestra podrá visitarse todos los viernes, sábados y domingos, de 14 a 18 horas*, con entrada gratuita y reserva previa en Godoy Cruz 2270, Palermo, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

En ese marco, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, realizó una recorrida previa y tomó parte en un acto de presentación en donde participaron las y los científicos de la Iniciativa Pampa Azul que asesoraron en el montaje de la muestra. Lo acompañaron la directora de Desarrollo de Museos, Exposiciones y Ferias, a cargo de la dirección del C3, Guadalupe Díaz Costanzo; la coordinadora Ejecutiva de la Iniciativa Pampa Azul, Carolina Vera; y la presidenta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Ana Franchi.

“Es una emoción enorme estar acá hoy, porque fui secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur y esta muestra encarna sin dudas una política de Estado. Nadie puede creer ni defender lo que no conoce. Lo que se propone en esta exhibición es destacar qué significa nuestro mar para los argentinos”, manifestó Filmus. “Repensar nuestra relación con el océano es una forma no sólo de volverse azul, sino de cuidar lo que los seres humanos destruimos cotidianamente. Nos señala también la necesidad de la investigación científica, de poner a la ciencia en las manos y las cabezas de la mayor cantidad de personas. Esta muestra es un claro ejemplo de una de las formas que tenemos de hacerlo, a través de la divulgación”, completó.

Vera, Filmus y Díaz Costanzo durante la presentación realizada en el auditorio del C3.

Organizada en cuatro ejes conceptuales (cambio climático, contaminación, biodiversidad, dimensión humana) plasmados en 20 dispositivos digitales y analógicos, “Océano. Volverse Azul” busca abrir discusiones ambientales, fomentar la respuesta activa del público y concientizar acerca de las posibles acciones que favorezcan la preservación del planeta. A futuro, se prevé que tenga carácter itinerante, para poder acercar a todo el país el conocimiento sobre nuestro Mar Argentino.

Desde 2019, el C3 trabajó en el diseño de la exhibición, que contó con el asesoramiento de las y los científicos de todo el país que integran la Iniciativa Pampa Azul, y la colaboración de organizaciones e instituciones afines a la temática.

Características de la exhibición
1. Biblioteca Azul. Los públicos de distintas generaciones son invitados a evocar recuerdos y sentimientos sobre el mar. Al mismo tiempo se sorprenden, descubren y conversan acerca de su vínculo con el océano a través de objetos cotidianos tan diversos como la sal marina, los billetes de 50 y 200 pesos, una red de pesca, un paraguas, fertilizantes agroquímicos o una lata de dulce de batata.

2. El mar como territorio. Caminando por encima del mapa bicontinental gigante de Argentina en el cual la Antártida se muestra en su real proporción con relación al continente, al mar y a las Islas, los públicos pueden identificar la inmensidad del territorio marítimo nacional. Al mismo tiempo pueden recorrer la nueva demarcación de la plataforma continental apreciando que es casi el doble de la superficie emergida de nuestro país (Ley 27.757-2020).

3. A buen bosque vas por algas. Quienes visiten este espacio podrán explorar, junto a científicos/as, buzos/as y algueros/as, las costas de la Patagonia, para sumergirse en el mundo secreto de las grandes algas, sorprenderse ante su monumental tamaño y descubrir su rol en la lucha contra el cambio climático y como reservorios de biodiversidad.

4. La mar no estaba serena. Desde una experiencia inmersiva potenciadora de los sentidos, las personas son invitadas a percibirse como parte de la transformación del planeta. El ciclo del agua afectado por el cambio climático es la excusa para visibilizar nuestra fragilidad y asumir la responsabilidad de las actividades humanas en la crisis climática actual.

5. Cada gota cuenta. A través de una línea de tiempo se destacan hitos en la historia de los esfuerzos de la comunidad internacional en la lucha contra el cambio climático. Se invita al público a reconocer los avances y disputas de las cumbres y tratados, junto con la necesidad de exigir como ciudadanos y ciudadanas el cumplimiento de las normativas sobre la reducción de emisiones para el año 2030 para evitar llegar a un punto de consecuencias irreversibles.

6. Con el agua al cuello. Este dispositivo exhibe seis especies que sufren los efectos del cambio climático en el Mar Argentino e invita a observarlas, explorarlas y constatar sus impactos negativos sobre la pesca y los ecosistemas marinos. Además, da cuenta de los proyectos de investigación científica que estudian estos impactos en Argentina.

7. Llegar a buen puerto. A partir de una videoinstalación se espera que el público visitante se informe sobre el enfoque ecosistémico de la pesca y la importancia del consumo del pescado. Además, podrá conocer el impacto sobre los ecosistemas marinos de la sobrepesca de la merluza en el Mar Argentino.

8. Navegar en un mar de dudas. Desafiar a quienes recorran este espacio a testear sus ideas y opiniones sobre el estado de la contaminación del océano, la existencia de microorganismos en el agua oceánica y el consumo del pescado en la dieta. Transformar ideas previas y sorprenderse con evidencias y datos sobre el Mar Argentino.

9. El océano se queja en las costas. Esta instalación visualiza que el Mar Argentino no está mayormente contaminado en su totalidad sino en algunos pocos lugares (entre los que se destacan cuatro) donde la concentración de contaminantes asociados a las actividades humanas es preocupante. Se invita a dialogar acerca de este problema y las acciones que podemos llevar a cabo como comunidad.

10. Aguas inquietas. El dispositivo nos presenta el problema de la contaminación por plásticos y su impacto negativo en el ecosistema marino y humano. A través de seis objetos de plástico de único uso cuestiona nuestros modos de consumo y nos invita a mapear los elementos de plástico que más usamos. Un desafío para ser parte de la solución.

11. Mapoteca del mar. Los mapas ilustrados nos permiten imaginar con rasgos visibles lo que no tenemos a la vista y no podemos observar en el espacio real. La mapoteca sobre el Mar Argentino invita a localizar e identificar lugares, reconocer sus nombres y establecer relaciones entre las especies, la actividad científica, la pesca, las características físicas y las temáticas del cambio climático y la contaminación presentes en la exhibición.

12. Una ola nunca viene sola. Un espacio oscuro es la ocasión para sumergirnos en el mundo de seres marinos microscópicos y comprender que todos los organismos viven en colaboración. Una cucharada de agua de mar puede contener millones de microorganismos que limpian las aguas del océano, secuestran dióxido de carbono atmosférico (CO2), generan oxígeno y circulan nutrientes que permiten la vida de las especies que podemos ver a simple vista.

13. Hagamos olas. Una propuesta de escritura colectiva que nace de las quejas y reclamos de muchas otras voces. Se trata de incentivar a la producción de ideas convocantes y provocativas que inviten a la acción. Con el estímulo de consignas de movilizaciones sociales argentinas en relación con temas ambientales, se invita a agitar las aguas. Las personas comparten deseos, esfuerzos y propuestas con las que se pueden comprometer, los escriben en tarjetones y los cuelgan en un muro colectivo.

14. Con rumor de fondo. Una invitación a escuchar los sonidos subacuáticos de tres especies de ballenas del Mar Argentino, a identificar las diferencias entre ellas y a conocer la importancia de la investigación científica asociada a los sonidos del mar.

15. En la cresta de la ola. Una producción audiovisual de CONICET Documental relata las tareas diarias y los saberes asociados a las campañas oceanográficas que son la base de la investigación científica en el mar. Conoceremos los preparativos de los barcos y la tripulación, la organización y coordinación de la comunidad científica, así como los deseos y preguntas que guían a quienes se embarcan en estas travesías de investigación. El video nos permite descubrir la vida a bordo e imaginar las emociones, desafíos y riesgos de estar en alta mar.

16. De cara al mar. En primera persona y en modo intimista las personas representadas en esta instalación se acercan y nos cuentan sobre los saberes y tradiciones de sus trabajos, oficios y profesiones vinculados al mar en su entramado cultural, científico y productivo. Sus historias de vida se vuelven próximas a los públicos quienes pueden reconocerse en algunas de sus prácticas cotidianas e identificarse con las vidas de mar.

17. Alto en el cielo. Se invita a conocer la importancia del nuevo satélite SABIA-MAR que se espera poner en órbita en el año 2023, y la tecnología satelital para obtener información a partir del color del mar sobre el ecosistema marino y la influencia de la actividad humana sobre el océano. Asimismo, se buscará que las personas que visitan este espacio tomen conciencia del rol del Estado, a través de sus organismos y empresas del sistema científico-tecnológico nacional, en el diseño, fabricación y gestión de tecnología satelital.

18. #VolverseAzul. Volverte Azul es la huella del compromiso de cada uno y cada una con el océano. Este dispositivo invita a «pintarse» de azul y sacarse fotografías para expresar la metáfora de la transformación cultural en la que repensemos nuestra relación con el océano para construir el futuro que queremos.

19. Ciencia azul. En esta instalación se presenta a científicos y científicas que trabajan desde distintas partes del país en investigaciones vinculadas al mar y cuyos saberes han sido fundamentales para el diseño de la exhibición.

20. Oficina del mar. Un espacio intergeneracional que nos propone actividades de escritura, dibujo y juegos al mismo tiempo que seguimos conociendo los secretos del océano.

Equipo asesor científico: Viviana Alder, Gustavo Antón, Silvia Blanc, Martín Brogger, Inés Camilloni, Luis Cappozzo, Lucía Epherra, Daniel Fernández, Mariano Ferro, Bárbara Franco, María Eva Góngora, Betina Lomovasky, Mariana Lozada, Cecilia Mantecón, Jorge Marcovecchio, Paula Raffo, Juan Emilio Sala y Carolina Tauro.

Organizaciones e instituciones que colaboraron: Astillero Río Santiago (ARS), Argentina Submarina, Asociación Pescadores Artesanales de Puerto Madryn, Comisión Nacional de Actividades Espaciales (CONAE), CONICET Documental, Cooperativa de Recolección, Acopio y Procesamiento de Productos de Mar, Fundación de Historia Natural Félix de Azara, Fundación Williams, Instituto de Conservación de Ballenas (ICB), Instituto Nacional de Investigación y Desarrollo Pesquero (INIDEP), Jóvenes por el Clima, Museo Argentino de Ciencias Naturales “Bernardino Rivadavia”, Museo del Puerto de Ingeniero White, Prefectura Naval Argentina, Proyecto Sub y Subsecretaría de Pesca y Acuicultura.

“Océano. Volverse Azul”
Viernes, sábados y domingos de 14 a 18 horas*
Entrada gratuita y requiere reserva previa en
www.ccciencia.gob.ar.
El C3 se ubica en Godoy Cruz al 2270, Palermo, Ciudad Autónoma de Buenos Aires.

*Desde el 29 de octubre, el sábado 30 desde las 19 horas por “La Noche de los Museos”, y el domingo 31 cerrado.

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El ministro de Ciencia visitó en Puerto Madryn el Ecocentro Pampa Azul y anunció obras por $20 millones

Daniel Filmus viajó a Chubut y recorrió el centro de interpretación costero-marino, que recibirá una inversión para ser el primero del país en incorporar la propuesta de la Iniciativa Pampa Azul. Junto con la presidenta del CONICET, Ana Franchi, participó del lanzamiento del Programa de Cannabis Medicinal.

El ministro Filmus recorrió el Ecocentro junto a las autoridades del municipio de Puerto Madryn. Foto: Prensa MINCyT.

Con el objetivo de continuar promoviendo iniciativas que fortalezcan el proceso de federalización de la ciencia y la tecnología en todo el país, el ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación, Daniel Filmus, viajó hoy a la ciudad de Puerto Madryn, Chubut. Allí anunció una inversión por parte del Ministerio de Ciencia de $20 millones en el Ecocentro de Puerto Madryn, que permitirá la reconversión de este espacio en el primer centro de interpretación costero-marino que incorporará la propuesta de la Iniciativa Pampa Azul.

El ministro Filmus expresó su satisfacción por la visita y “por estar convocado hoy para trabajar por Pampa Azul. Nuestro país la ha dado muchas veces la espalda al mar, y la idea de propuestas como esta es que tengamos una cultura oceánica más importante, que nos va a ayudar a defender nuestra soberanía nacional”. Filmus aseguró además que Pampa Azul “no podría existir exitosamente sin una ley que la respalda como lo es la Ley PROMAR (Programa Nacional de Investigación e Innovación Productiva en Espacios Marítimos Argentinos). Esos recursos de la Ley PROMAR son los que el Ministerio de Ciencia y Tecnología va a aportar junto a la provincia para apoyar al Municipio en la redefinición del Ecocentro, en la misma dirección en la que viene trabajando”.

En ese contexto, se firmó una carta de intención para la concreción del proyecto junto con el intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre; y el secretario de Ciencia, Tecnología, Innovación Productiva y Cultura de la provincia del Chubut, Mauro Carrasco. También participó del evento la viceintendenta de la ciudad, Noelia Corvalán.

De esta manera, el Ecocentro Pampa Azul fortalecerá la mirada científico-tecnológica, cultural, educativa y artística existente, añadiendo un enfoque más amplio, inclusivo y soberano y un fuerte compromiso socioambiental territorial. En la actualidad, el Ecocentro cuenta con más de 2.000 metros cuadrados y es visitado por un promedio anual de 50.000 personas entre residentes locales, turistas de otros lugares del país y extranjeros. Además brinda anualmente en forma gratuita actividades a más de 6.000 niños de la provincia del Chubut.

Visita al CENPAT
Por la tarde, Filmus se trasladó al Centro Nacional Patagónico (CENPAT-CONICET), en donde se reunió con la presidenta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Ana Franchi, quien comunicó la obra del Jardín Maternal del CENPAT, que contará con una inversión de $25 millones por parte del CONICET. Adicionalmente, se asignaron unos $30 millones para la reparación de la infraestructura de techos del edificio del CENPAT.

“El CENPAT es uno de los centros de mayor desarrollo del CONICET, en donde estamos haciendo un conjunto de inversiones junto con el anuncio de la incorporación de 14 investigadoras e investigadores locales a la Carrera de Investigador Científico, que es un aporte muy importante”, afirmó el Ministro.

Las autoridades participaron también del lanzamiento del Programa de Cannabis Medicinal, que promueve el cultivo, producción y desarrollo de fitopreparados medicinales en colaboración con el Ministerio de Salud de provincial, en el marco de la ley 27.350. Durante el acto se realizó la firma de un convenio de asistencia técnica con la empresa Minas Magri S.A., que proveerá de sustratos para el cultivo destinados al proyecto de cannabis medicinal.

En relación al cannabis medicinal el Ministro sostuvo: “La ley fue posible porque hubo un trabajo científico antes. Avanzan las leyes no solo porque hay una demanda social, sino porque hay científicos que estudiaron, que investigaron y que muestran que hay una respuesta para esta área. Pese a las críticas, esta normativa pudo salir gracias al aporte de la ciencia, y se demostró que los científicos pueden solucionar problemas concretos de nuestra sociedad”.

En la presentación participaron el intendente de Puerto Madryn, Gustavo Sastre; el director del CENPAT, Rolando González José; el ministro de Salud del Chubut, Fabián Puratich; y el ministro de Agricultura, Ganadería, Industria y Comercio de la provincia, Leandro Cavaco.

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Se realizó el bautismo de botadura del Buque de Investigación Científica “Shenu”

Este navío que se integra a la flota de Pampa Azul servirá de plataforma para el desarrollo de investigaciones científicas relacionadas con la oceanografía (física, química y biológica), el estudio del ecosistema marino del fondo, la geología costera, la hidroacústica y la evaluación de los recursos vivos locales.

Salvarezza, Franchi y los funcionarios y funcionarias a bordo del “Shenu”.

El ministro de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Nación, Roberto Salvarezza, participó hoy, junto a la presidenta del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (CONICET), Ana María Franchi, del bautismo de botadura del Buque Científico “Shenu” del CONICET, que será tripulado por la Armada Argentina.

Del acto, que se llevó a cabo en el puerto de la Ciudad de Buenos Aires, participaron además el secretario de Malvinas, Antártida y Atlántico Sur, Daniel Filmus; el director del Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC) Dr. Gustavo Ferreyra; el Jefe del Estado Mayor General de la Armada, Vicealmirante Julio Guardia; la secretaria de Investigación, Política Industrial y Producción para la Defensa del Ministerio de Defensa, Daniela Castro; el Ingeniero Marcelo Pacheco; así como también autoridades del Servicio de Hidrografía Naval, de Prefectura Argentina, de la Armada Argentina, de Cancillería argentina; del CONICET y miembros de la Comisión directiva del Yatch Club Argentino.

El BIC “Shenu” (“Viento”, en lengua yamana) fue concebido como una embarcación con capacidad para desarrollar investigaciones marinas y de apoyo a otras disciplinas del Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC) e instituciones asociadas en el área del Canal Beagle. Se integra a la flota de Pampa Azul, formará parte de la Red de Observación del Mar Argentino (ROMA), y constituirá un elemento clave para las investigaciones a desarrollarse en el Centro Interinstitucional en Temas Estratégicos de Ushuaia, cuya creación ha sido propuesta conjuntamente por el Ministerio de Ciencia y la Cancillería Argentina.

El “Shenu” se integra a la flota de Pampa Azul y formará parte de la Red de Observación del Mar Argentino (ROMA).

Al respecto, Salvarezza destacó la trascendencia que tiene la botadura del “Shenu”: “Con todo lo que significa desde lo local hasta lo general, pensando en el CADIC, en sus científicos y científicas, y en los esfuerzos para tener este barco, para hacer investigaciones científicas”. Asimismo, agradeció al Ministerio de Defensa “que nos está ayudando para que volvamos a poner esta flota en condiciones y poder seguir ejecutando programas tan importantes como la iniciativa Pampa Azul, esta iniciativa que contemplaba mirar al mar. Esto era algo que representaba un desafío: el poner el conocimiento en un lugar de disputa geopolítica, donde Argentina debe poner lo mejor que tiene, que son justamente sus recursos humanos, sus investigadores e investigadoras y la capacidad para producir conocimiento”.

El BIC “Shenu” tiene capacidad para desarrollar investigaciones marinas y de apoyo.

Para finalizar, el ministro de Ciencia hizo hincapié en la Ley de Financiamiento que debate la Cámara de Diputados de la Nación: “Ustedes saben lo importante que es para este Gobierno la Ciencia y la Tecnología. Hoy podría tener media sanción esta Ley que impulsamos y que es apoyada de forma unánime. Significa multiplicar por cuatro la inversión que hoy hace el Estado Nacional en 10 años”. El titular de la cartera científica consideró que esto, “es para todos nosotros la garantía de que la Argentina va a seguir esta política de Estado y que no hay que abandonar, porque se construyen con decisiones y acciones concretas. Ese es el camino que estamos trazando y es el que vamos a continuar”.

Por su parte, Franchi afirmó que “es un día muy especial para nosotros. Por un lado es el Día Internacional de la Mujer y la Niña en la Ciencia. Por otro, es maravilloso llegar a la concreción de tener este barco que soñaron muchos, especialmente las trabajadoras y trabajadores del CADIC y que pusieron un empeño enorme con la colaboración de muchos y muchas. Lo que se ve en este día son varios sueños: el sueño de que las mujeres protagonicen en ciencia y tecnología, el sueño de este barco y el sueño de que la Ciencia y la Tecnología contribuyan a un país soberano, libre y justo”.

En tanto, Ferreyra, luego de realizar una introducción sobre el CADIC, aseguró: “Este barco va a brindar servicios no solamente para el CADIC sino para todas las instituciones que están en la zona y trabajar en conjunto con Chile. Además, va a servir para conectar la Antártida con la región subpolar que es fundamental desde el punto de vista científico. Quisiera agradecer a las autoridades del CONICET por el continuo apoyo, a todo el equipo del CADIC, a la Armada, a la Prefectura Naval y a la empresa que ha sabido comprender cuáles eran nuestras necesidades”.

En este sentido, Daniela Castro, expresó: “Esta es una alianza más que se ha constituido entre varios ministerios no solo nucleados en Pampa Azul sino en la profunda convicción de que el desarrollo de la Argentina es en este camino. Hoy hacer ciencia es ser soberanos, sobre todo pensando en la extensión territorial de nuestro país”.

A su turno, Filmus felicitó al Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación, al CONICET y al CADIC “por contar con este nuevo buque, que va a ayudar a profundizar la investigación científica. No hay un camino mejor para consolidar la soberanía y nuestras perspectivas frente al mundo que no sea el camino de la investigación científica”.

“El beneplácito que significa para nosotros este nuevo gesto de confianza del CONICET, esta relación de sinergia y cooperación mutua entre la Armada y el CONICET tiene más de 50 años. Para nosotros no es más que seguir los principios del Almirante Storni, vinculado a la necesidad de conocer el medioambiente marino como punto fundamental para su posterior protección y para el desarrollo del país en general. Siempre el bautismo de una embarcación es un gesto de una sociedad que mira al mar como parte de su integridad territorial”, señaló el Vicealmirante Julio Guardia.

En el marco de la iniciativa Pampa Azul, la embarcación tiene previsto colaborar en la agenda de trabajo de la Comisión Binacional Argentina-Chile de Cooperación en Investigación Científica Marina Austral, en la que participan el Centro Austral de Investigaciones Científicas (CADIC) y el Centro de Investigación Dinámica de Ecosistemas Marinos de Altas Latitudes (IDEAL) de Chile.

Franchi y Salvarezza durante la ceremonia de botadura.

El equipamiento de base que será montado a bordo incluye guinche y pórtico para sistema de arrastre para muestreos de fondo y pesca, pescante con roseta y redes de plancton, ROV e instrumental acústico. Asimismo, se podrá emplear como plataforma académica para la formación de RRHH orientados en temas marinos en colaboración con las universidades locales y otras a nivel nacional.

La oportunidad de incluirlo como un Servicio Técnico de Alto Nivel permitirá, junto al buque Austral y Puerto Deseado, contar con una flota científica de oportunidad, dependiendo de las áreas a investigar y los objetivos estratégicos de la zona más Austral de nuestro país.

Sobre el BIC “Shenu”
La timonera ubicada a proa de la embarcación amplía el espectro de visibilidad circular por ambas bandas, permitiendo acceder por la cubierta al castillo de la misma. El castillo está diseñado con la premisa de permitir acceder a 2 personas para trabajos científicos desde la borda en la proa de la embarcación.

En el lado popel de la timonera, hacia la cubierta corrida de trabajo, se instaló una mesa de acero inoxidable fija para trabajo científico húmedo. Esa mesa, el baño y la cubierta de trabajo se lavan a través de un sistema de agua de mar a presión suficiente.

La nobleza del diseño del buque permitirá desarrollar estudios multidisciplinarios integrados. El criterio empleado en su construcción hace foco en las maniobras científicas necesarias para obtener muestras perfectamente trazables.

El “Shenu” ha sido incorporado a la matrícula nacional, construido totalmente en aluminio de calidad naval (5083 H111) apto para navegación marítima austral, zona del Canal de Beagle. Las condiciones de mar son olas del orden de 2 metros y vientos de aproximadamente 15 nudos con rachas de 30-40 nudos.